Punta del Diablo
Punta del Diablo o - Point of Devil – como le gusta decir a mi cuñado holandés (según el le pone más onda). Ya no es el pueblito de pescadores de hace 30 años, tampoco la aldea Hippie que solíamos visitar con mis amigos hace diez años. Hoy es una sutil mezcla de balneario de moda con un dejo de perfume hippie y adolescente. No obstante las cabañas de piedra y madera con grandes ventanales, los carteles caseros, los palafitos, su iluminación fantasmagórica y otros factores hacen que este balneario siga siendo una verdadera maravilla que enamora a locales y extranjeros por igual.
El nombre original era Aldea del Mar y Santa Teresa de la Coronilla. Cambiando a mediados del siglo XX por el del Cerro de Los Pescadores de la Punta del Diablo que aludía al origen de muchos de los que allí pescaban. Como en otros lugares el uso fue simplificando el nombre hasta el actual de Punta del Diablo. Actualmente su población permanente es de 700 habitantes aprox. La mayoría artesanos y pescadores.
En verano explota de gente mayoritariamente uruguayos, brasileños y argentinos aunque suele verse algún europeo que otro.
Si busca una mezcla de naturaleza, surf y vida simple este es su sitio. No dude en visitar este balneario uruguayo. Las opciones de alojamiento en verano van desde 15 dólares por una cama en cuartos compartidos, pasando por 50 dólares por ranchos rústicos por día hasta algunos un poco más lujos por 150 o 200 dólares diarios. La comida es muy económica pero sencilla.
Sin dudas Punta del diablo es una opción más que recomendable para dejar atrás todo el stress del año.
